Canciones con corazón VII.

Parece ser que últimamente me ha dado por escuchar canciones bastante antiguas. Canciones que me marcaron en mi infancia o juventud y que son las que han contribuido a que sea lo que hoy soy. Ese es el caso de la canción de esta semana: "Desde mi libertad" de Ana Belén.
Es una de esas canciones que he cantado desde siempre. Tiene una letra que me caló muy hondo. Me enseñó que siempre tienes que ser tu misma, a hablar con tu propia voz, seguir tu propio camino aunque eso signifique apartarte de los caminos trazados o de las convenciones establecidas. A ser fuerte, a no depender del apoyo de los demás porque seguramente éste no llegaría cuando realmente lo necesitase. A no dejarme cortar las alas por nada ni por nadie. Que nada vale mas que la libertad.
Desgraciadamente nos inculcan desde niños (a las mujeres en especial y sobretodo a las de mi época) que tu finalidad máxima en esta vida es encontrar a tu príncipe azul y formar una familia. Que no serás realmente tú, ni feliz si no encuentras a tu media naranja, esa persona que te complete.
Nada más lejos de la verdad... ¡¡¡¡Somos seres completos por nosotros mismos!!!! ¿Cuantas veces renunciamos a un millón de cosas por contentar a la persona que se supone que amamos y que nos ama? Y ¿eso es realmente amor?. ¡¡¡Por supuesto que no!!!
El amor de verdad es libre, sin cadenas ni ataduras. Un sentimiento arrebatador que cuando llega no puede esconderse y que cuando se acaba no hay cadena, anillo ni papel firmado delante de un juez, que pueda retenerlo.
Para mí amar a alguien no significa querer cambiarlo, adaptarlo a lo que yo quiero. Para mi significa amarlo con sus virtudes y sus defectos. Sin cambiarlo, porque yo no quiero cambiar por él. Un amor que no me exija ni me imponga. Un amor que no piense por mi. Que me deje volar libre. Porque sabrá que siempre volveré a él.

Desde mi libertad. (Ana Belén)


Sentada en el andén,

Mi cuerpo tiembla y puedo ver,
Que a lo lejos silva el viejo tren
Como sombra del ayer.

No será fácil ser
De nuevo un solo corazón,
Siempre había sido una mitad
Sin saber mi identidad.

No llevare ninguna imagen de aquí
Me iré desnuda igual que nací,
Debo empezar a ser yo misma y saber
Que soy capaz y que ando por mi piel.
Siempre había sido una mitad,
Sin saber mi identidad

No llevare ninguna imagen de aquí,
Me iré desnuda igual que nací,
Debo empezar a ser yo misma y saber,
Que soy capaz y que ando por mi piel,

Desde mi libertad
Soy fuerte porque soy volcán,
Nunca me enseñaron a volar
Pero el vuelo debo alzar.

Nunca me enseñaron a volar
Pero el vuelo debo
Alzar

Sentada en el andén,